El Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Cuenca ha alertado de la preocupante situación demográfica que atraviesa la ciudad, que continúa entre las capitales de provincia con menor número de habitantes de España y muestra una tendencia reciente de pérdida poblacional.

Según los datos oficiales del padrón municipal del Instituto Nacional de Estadística (INE), la ciudad de Cuenca cuenta con alrededor de 53 429 habitantes, situándose por debajo de otras capitales de tamaño similar como Ávila, Zamora o Huesca y como una de las pocas capitales de provincia que ha perdido población en el último ejercicio demográfico. Con estas cifras, Cuenca se mantiene como la cuarta capital de provincia menos poblada de España, solo por delante de Teruel, Soria y Segovia en número de habitantes.

La presidenta del Grupo Municipal Popular, Bea Jiménez, ha denunciado la falta de políticas eficaces por parte del equipo de Gobierno socialista para revertir esta tendencia, que pone en riesgo el dinamismo económico y social de la ciudad.

“La ausencia de un plan claro de desarrollo económico, la falta de medidas de atracción de empresas y empleo, y la escasa apuesta por retener talento joven están provocando que nuestra ciudad pierda competitividad y oportunidades frente a otras capitales de Castilla-La Mancha como Albacete, Toledo o incluso otras capitales medianas que sí están creciendo o manteniendo su población”, ha afirmado Jiménez.

Desde el Grupo Popular reclaman medidas urgentes y coordinadas para frenar la sangría demográfica y consolidar un proyecto de futuro para Cuenca, que incluya:

·        Incentivos fiscales y apoyos a la implantación de empresas y autónomos.

·        Programas para retener y atraer talento joven, con vivienda y oportunidades laborales.

·        Impulso a la oferta educativa y formación profesional ligada a sectores con capacidad de crecimiento.

·        Promoción del turismo sostenible y de calidad, aprovechando la condición de Patrimonio de la Humanidad de la ciudad.

Por último, Jiménez ha asegurado que “sin un cambio de rumbo la retención demográfica y la competitividad de Cuenca seguirán en riesgo, acentuando la brecha con otras capitales de la región y del país”.